DE LO INTROVERTIDO A LO SOCIABLE. 2 Parte

Uno al  principio, es introvertido. Todos somos así, y muchos de nosotros no pueden salir nunca de esta faceta. Apocada, silenciosa, muy poco bulliciosa. Como estando siempre "pensando",aunque muchos de nosotros no  pensamos tanto. Para mi caso, siempre fui pensante. Desde chico, hacía análisis de la vida, las personas, y de mí mismo. Eso me ayudó y a la vez, sumergió en estados anímicos bravos. No hablaba mucho. Para una de mis crisis-la de 1981- ya me encontraba más despierto, si se me permite el término. 
Uno debe ver en la vida que la intensidad de vivir, debe ser expresada. No quedarse en la introversión. Para mi caso, ésta se asimilaba, a una terrible timidez. Derivada del bulliying. Entonces, la enfermedad dio paso a la extroversión. Faltaba,claro, mi disposición al sexo. A la joda, digamos. Sí, empecé a ser dicharachero.Hacia chistes. Actuaba. Y de esta manera, sólo me empecé a preguntar "´¿por qué las mujeres no accedian a acostarse conmigo?". La respuesta la tengo ahora. La enfermedad me hizo especial, en no fumar, escribir, leer, pensar, no manejar autos, no salir mucho a los cafés, filosofar. Y todo esto, a las mujeres no les gusta. A ellas, les agradan los tipos que son atrevidos, con una gran fuerza viril, en lo que hace a lo convencional. Por eso, no les gustaba. Sin embargo, tuve mujeres que fueron amigas. Yo fui siempre con ellas, algo de sacerdote. Dándole consejos. Mi extroversión fue buena para mi, más no para ellas. Porque si yo no trabajaba-otra de mis incapacidades-les causaba rechazo. 
Entonces, la vida no me sonreía. Y llegué al...hospicio. 
Aqui, cuando supe del horror, la muerte y la locura, empecé a subir una alta, larga y luminosa escalera
En ella me encuentro, desde 1996-97, más o menos. Los chistes en mi vida, aumentaron. Los escribia y decia a la gente. Era un frescor, una pátina de alegría, que perfumaba mi vida. Hoy lo sigue haciendo. 
Me conquisté a una mujer, muy similar a mi.Pero no en la extroversión. No era simpática.  Porque eso fui casi siempre, un tipo simpático. Ja!. Un tipo atrayente, pero no para la cama. Aunque padecí esto,debido a la cultura, a mi machismos inmanente. Del cual,no puedo salir, desde ya. Sin embargo, lucho para seguir en felicidad,o lograr algo de ella. No decaigo. Como decía, esta mujer que logré "atrapar", era timida. Y con ella viví quince años. Hasta que me lancé a otra etapa de extroversión, más audaz. Aqui en Mendoza, donde vine a vivir, hace nueve años. Y en este lugar, esperar que el período de audacia, de lugar a una mayor comprensión de mi mismo. Cosa en la que estoy...