Todas las personas, debido a la educación rígida de los totalitarismos sociales y políticos, nos hemos conducido en la vida, complicando y haciendo penoso nuestro transitar por este mundo. Porque la vida, en sí misma, es simple, pero la educación se ha encargado de hacernos ver, que -entre otras cosas- hay que adquirir logros, tanto espirituales como materiales. Y la verdad, todo ya lo traemos de nacimiento. O sea, la felicidad está en nuestro ser.Y con ella, la posibilidad de acceder a una vida plena hagamos lo que hagamos. Me dirán "si,pero yo naci pobre, y sin mamá", o " no tengo qué comer, y no sé leer ni escribir". Es cierto; hay vidas difíciles. Pero ¿por qué también hay gente que en esas condiciones vive feliz?. No todos son infelices. ¿Usted cree que si?. Se trata de hacer activar uno de los dones que nos da el llamado Espíritu Santo. Es el don de lo simple. Hacer que todo lo que nos cueste, o sea difícil, convertirlo en algo fácil, con un mínimo esfuerzo. No vale la pena llorar por lo que no se consigue, sino reir por lo que se logra. Y cada día, hay motivos para practicar la simplificación, es decir, hacer sencillo los momentos. Por ejemplo, en mi caso si no se hacer algo manual-cosa que me suele pasar- me digo " no sé hacerlo". Y listo. Luego, lo aprendo, o si no lo aprendo..¿cuál es el problema?. La vida me regala igual, felicidad. Porque después de todo, el SENTIMIENTO,es lo que marca el ritmo de la persona feliz. Y si me siento FELIZ., soy FELIZ!.¿No es esto algo SIMPLE?:
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